Por: francisco Villalobos Invasión Coreografía e interpretación: Mauricio Castillo. Teatro Francisco I. Madero. Tuxtla Gutiérrez, Chiapas. Mayo de 2022. ¿Qué puedo decir de una pieza coreográfica que, en lo profundo, no sólo refleja una verdad y una creencia que atormenta a un cuerpo ontológicamente bello? Quizá podría comenzar adulando al intérprete, por la maestría con la que se movió en el escenario, o por el manejo sutil y cadencioso de la tela alicrada de su playera. Sobrevuelan en mi mente un sinfin de imágenes, pero la más contundente es la de la espera, de la angustiante espera, del vaivén interminable de los dedos aligerados, del cambiar de lado una y otra vez, para propiciar, en la realidad, el milagro de la curación. Lo anterior quizá suceda porque la ficción de la danza mueve energías que edifican desde el amor; y creo que desde ahí compone Mauricio Castillo, joven talentoso y estudiante de la licenciatura en danza, del Centro de Estudios para el Arte y